Pocos países pueden presumir de playas tanto como España. Los miles de kilómetros de costa que rodean nuestro territorio acogen playas impresionantes e idílicas, auténticas joyas famosas y apreciadas en todo el mundo.
Os presentamos una pequeña selección de las mejores tanto del mediterráneo como del atlántico y el cantábrico. Id tomando nota para organizar las vacaciones.
PLAYA DE RODAS (Islas Cíes, Pontevedra)
Justo enfrente de Vigo, las Islas Cíes son un paraíso natural protegido desde hace muchos años. En ellas se encuentra la Playa de Rodas, elegida mejor playa del mundo por el diario británico The Guardian. Más de un Km de fina arena blanca rodeada de vegetación y aguas cristalinas. Su acceso está restringido y hay que reservar con antelación.
PLAYA DE GULPIYURI (Asturias)
Es si duda una de las playas más singulares del país: una playa marina situada en el interior. No es muy grande, poco más de 50 metros de longitud. El mar y la arena blanca penetra por debajo de los acantilados. Está catalogada como monumento nacional. Como defecto, el acceso. Para llegar a ella hay que recorrer un camino agrícola que también es parte de la experiencia.
PLAYA DE BOLONIA ( Tarifa, Cádiz)
Un clásico de la costa gaditana. La zona de Tarifa acoge esta playa única cuyas gigantesca duna, declarada monumento natural y muy relevante a nivel ecológico. Sus aguas templadas y casi 4 kilómetros de arena blanca son uno de los principales atractivos de la zona.
PLAYA DE ITZURUN (Zumaia, Euskadi)
La belleza natural de esta playa le ganó ser uno de los escenarios de la serie más famosa de los últimos tiempos, Juego de Tronos. No es muy grande, pero las impresionantes formas de sus acantilados, de gran valor geológico, hacen de este arenal un espacio único de gran belleza.
PLAYA DE LAS CATEDRALES (Ribadeo, Galicia)
Una de las playas más singulares del mundo. Los espectaculares arcos naturales formados en sus acantilados dan nombre al conjunto, formando una increíble catedral natural esculpida por el mar en la roca. Con marea alta la playa es totalmente inaccesible y su acceso está restringido, con lo que conviene informarse en su web de los horarios de visita.
CALÓ DES MORO (Mallorca, islas Baleares)
A unos 6 kilómetros de la localidad de Santayí en la isla de Mallorca encontramos esta pequeña cala de arena muy fina y blanca como la nieve. El agua es un espectáculo cromático de tonos turquesas y azules que invitan a disfrutar de un reconfortante baño. Su fama no deja de crecer y en verano se llena. Si puedes, visítala fuera de temporada.
PLAYA CAROLINA (Murcia)
Esta cala virgen típicamente mediterránea se ubica en un precioso entorno natural protegido dentro de la red Natura 2000 por la gran relevancia de su biodiversidad. Aguas turquesas, arena blanca y fina, vegetación.
PLAYA MONSUL (Cabo de Gata, Almería)
El Cabo de Gata es un lugar que no deja indiferente a sus visitantes. Sus preciosos pueblos blancos en contraste con sus costas de tierras de reminiscencias volcánicas son forman un destino muy apetecible y lleno de encanto. Y sus playas no los son menos. Playa Monsul es un lugar perfecto para relajarse y huir de las grandes masificaciones de otros lugares.
CALA SAURA (Formentera)
Las baleares están cada vez más masificadas, por lo que si buscas relax y tranquilidad, Formentera es tu destino. Con montones de calas de arena blanca y aguas cristalinas, la isla es auténtico paraíso mediterráneo. Cala Saura, representa todo eso y más.
PLAYA DEL INGLÉS (Maspalomas, Gran Canaria)
El paisaje dunar que ofrece la Playa del Inglés en la zona de Maspalomas no tiene parangón. Es como estar en medio del desierto para, al final, encontrarte con el océano atlántico en toda su inmensidad.